La familia de Amélie Nothomb, la autora de este librito breve pero intenso, era de procedencia belga (parte francesa), pero ella nació y creció en Japón.
Como muy bien me informó Hiro, esta escritora que desde 1992 publica un libro cada año, hace dos tipologías de libros: las novelas y las autobiografías con toques de humor. Este libro nos cuenta las vicisitudes que tuvo al entrar a trabajar en una empresa Japonesa durante un año.
El siguiente libro que quisiera leer se trata de Metafísica de los tubos el cual nos explica la vida de la autora de los 0 a los 3 años.
Estupor y temblores
143 páginas
Ed. Anagrama, 2004
Traducción de Sergi Pàmies (del francés)
ISBN: 84-95971-19-4
Es un tipo de prosa que te atrapa desde la primera sílaba. Durante el libro se leen las descripciones indispensables para situar a la persona lectora. Es un libro directo y refrescante.
Con muchos toques de humor, -que me procuraron más de una carcajada en los ferrocarriles, cosa que suscitó muchas palabras interrogantes. Mi risa no es sutil, por así decirlo- la autora te traslada a su lugar de trabajo y te hace ver e imaginarte las conversaciones que tiene consigo misma ante las situaciones que se va encontrando.
A parte del valor que tiene como libro, también describe ciertas creencias y tradiciones japonesas que anteriormente desconocía.
Una vez se va desarrollando el relato, unx va conociendo qué incomoda a las personas niponas: qué suscita quejas (como por ejemplo, el sudor), en situaciones laboralmente injustas no se ve la más leve confrontación, aunque estas lleguen a ser crueles, largo etc.
Según la visión del libro, unx puede pensar que el respeto por el trabajo y/o tu superior suscita una falta de carácter o de autoestima. Aunque reiteradamente los compañeros laborales de la protagonista vean que esta no está siendo bien tratada o vean que se le están infringiendo "castigos" o trabajos a todas luces desagradables, esto no provoca ningún tipo de queja. La autora narra este tipo de situaciones de manera leve y a menudo cómica, pero no deja de ser indignante.
El libro tiene un final agridulce en cierta manera, pero la autora deja ver que con el paso del tiempo esta sensación se desvanece y te queda una sutil sonrisa al pensar que gracias a las vicisitudes que se encontró, la inspiraron para que, unos años después, este libro le hiciera ganar el Gran Premio de novela de la Academia Francesa.
¿Qué os ha parecido a vosotrxs?
¡Nos leemos!
jajajajaja ja t'imagino rient amb el teu riure "peculiar" en ple ferrocarril en hora punta XD
ResponderEliminarPerò sí, jo també recordo que vaig riure molt amb aquest llibre: el primer que llegia d'aquesta autora. Em va agradar tant, que va fer que busqués més obres de la Nothomb. Avui en dia, és una de les meves escriptores vives preferides.
M'alegra que hagis xalat tant llegint-la :D